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Zapopan, Jal.- El 7 de enero del 2015 fue la última vez que la familia de Heriberto Rosales Castañeda lo vio cuándo salió de casa para ir a trabajar.
«Era chofer, pero trabajaba por su cuenta, entonces ese día dijo que iba a salir a trabajar y llego a mi casa agarré una mochilita pequeña con unos cambios de ropa, se iba a ir, era martes y dijo que para el sábado iba a estar de regreso y el jueves fue la última vez que hablamos con él».
Desde aquella tarde ya no supieron más de él, relata Ana Lilia, su hija. Tiene 8 años en búsqueda de su padre… hasta el momento no ha encontrado datos que les ayuden a localizarlo.
«Pues era muy alegre, en las fiestas era el alma dela fiesta, bromeaba, sacaba risa, si tiene un carácter fuerte, pero con nosotros, como padre, como papá, era como un amigo».
Pese a los años, la esperanza sigue viva de volverse a ver, a abrazar, a reencontrarse.
«La esperanza es que regresen con bien, así pasen, cómo ahorita mi caso 8 años, 10 años, la esperanza de volverlos a abrazar, a verlos con bien».
Lilia espera que su padre regrese a casa, por lo que asegura que continuará recorrido los rincones de Jalisco para la localización de Heriberto, en tanto la Fiscalía de Jalisco continúa con más investigaciones por su desaparición.
